El líder de Los Enanitos Verdes dice que, además, está ecológico.
Puntos suspensivos, como que la charla viene de otro lado (...). El revival ochentoso: Soda, Fabulosos Cadillacs, este año le tocó el turno a Miguel Mateos, que festejó los 25 años del disco Rockas vivas, y en cualquier momento toca GIT con su sonido de marmicoc. Puntos suspensivos.
"Yo entiendo lo de Mateos; yo fui público suyo en aquellos shows grosos. Se pueden hacer varias lecturas". ¿Vamos con lo del vaso medio lleno o medio vacío? "Exacto. Si una banda se vuelve a juntar es porque alguna vez sucedió algo y quiere ver si vuelve a suceder. En mi caso, los quiero a todos y sé que si se juntan es porque les gusta tocar. Es cierto que suena a recurso, pero es gente que le dio tanto a la música que, a mi parecer, no tendrían nada que demostrar".
¿Y cuánto tiempo pasó del lanzamiento de "Contra reloj"?
Nosotros sacamos ese disco en el ‘86. Empezamos a grabarlo en marzo, abril, y salió en julio, agosto.
¿No da celebrar los 24 años y pico del disco que los hizo famosos?
Já, no creo. Hace poco vi a Paul McCartney en Phoenix y lo que más me llamó la atención fue su tremenda exaltación de los temas Beatle. Cuando hizo Blackbird, con los mismos intrumentos con los que lo había grabado, nos transportó a un lugar que jamás hubiéramos soñado. Con esto quiero decir que no hay por qué renegar del pasado.
Y aho...
Oí: de pronto una cámara lo muestra a Paul y él se ríe, ríe como un pibe. De todo el recital, me quedo con ese instante. Era como ver al beatle de los ‘60.
Y ahora ustedes se juntan para una gira nacional…
No nos juntamos. Nunca nos separamos. Nos tomamos un descanso entre el ‘89 y el ‘92, paramos unos años y eso fue realmente terapéutico, pero nunca nos separamos. Sí cambiamos músicos y ahora estamos tocando con Jota Morelli en batería (que reemplazó al histórico Daniel Pícolo).
¿Pero no les convendría aprovechar cierta confusión y vender un "Vuelven los Enanitos Verdes blá blá"?
No me parece correcto. El año pasado tocamos en Córdoba. ¿De dónde volvemos? ¡¡De Córdoba!! -se ríe Marciano, y si Marciano fuera un bombón te lo comerías de un bocado-. No, compañero, no tenemos necesidad de mentir: ya estoy más allá de eso. No quiero el éxito a cualquier costo. Es más, en lo que a mí respecta, somos súper exitosos, y en Buenos Aires ya somos una especie de grupo de culto.
Stop. Dos años atrás hablamos con Marciano que, no sé si saben, vive en el desierto de Sonora, ahí nomás de donde empezó la mítica reeducación de Carlitos Castaneda. Y esa vez, Marciano, dijiste algo así como que Mendoza le había quedado lejos al rock nacional y que con Buenos Aires siempre se habían sentido un poco empequeñecidos.
Marciano, mendocino y risueño ilustre: "Buenos Aires es como una mujer frígida. Igual, estoy mucho más a gusto en Buenos Aires. Aunque voy de paso, no me puedo olvidar de que viví en la Capital 17 años. Y cuando la recorro sólo tengo flashes deliciosos".
La gente ha visto marcianos y hay quien ha visto un perro marciano y hasta un tractor marciano. Y entre los que se preguntan por la vida extratererreste y los que quieren saber si los enanitos verdes, en minúscula, existen (el grupo y el cuento de la musa inspiradora), se nos viene encima una inquietud sobre ufología y alrededores:
¿Fabio Zerpa será fan de los Enanitos Verdes?
No sé, pero con los extraterrestres tengo cierto swing. Y te voy a decir algo que te va a sorprender: una vez estábamos haciendo una entrevista en Guadalajara, en un edificio con una ventana grande. ¡¿Qué es eso?! El cielo limpio y de golpe vemos una pelota plateada. La pelota girando en el cielo...
Fabio Zerpa también debe haber confundido ovnis con boeings 747...
No. Nosotros estábamos en un edificio y veíamos todo muy claro: la pelota estaba como a 15 cuadras y no queríamos cerrar los ojos para no perdernos nada, hasta que la pelota desapareció. Al otro día, estando en el aeropuerto, se lo dijimos al de la Torre de Control, y no desmintió nada. Igual, creo que con los extraterrestes tengo cierto swing. Cuando me compré un departamento en Buenos Aires, en Palermo, abrí la ventana y vi pasar algo a una velocidad increíble.
Vos que sabés, ¿en el 2025 quedará vida inteligente en la tierra?
Pienso en la frase de Einstein: no sé con qué armas se va a pelear en la siguiente Guerra mundial, pero seguro que en la otra se va a pelear con palos y piedras. Se están haciendo mil cagadas en el planeta. Ojalá reaccionemos. Los medios deberían servir para generar esa clase de conciencia.
Enanitos: más verdes que nunca.
¡Estoy ecológico! Yo vengo cada tanto y me llama la atención la cantidad de gente que fuma en la calle. Es raro, no se ve en otros lados. Pienso que no estamos comiendo bien y creo que es posible mejorar nuestras rutinas alimentarias. Yo lo hago, descubrí que la verdurita tienen sentido. Estoy cumpliendo 50 años y me siento mejor que a los 20, al menos me dan ganas de hacer cosas que no hacía 30 años atrás.
Vivís en el desierto de Sonora (su mujer es mexicana) y debés estar rodeado de chamanes. Contanos tus experiencias con el peyote.
Me gustaría experimentar, aunque el tiempo que tengo en Hermosillo, mi pueblo, es tiempo de descanso y no de experimentación. Tengo muchos amigos que probaron. Uno me dijo que se había acercado a un árbol y que empezó a escuchar a los pajaritos, y que los pajaritos hablaban en perfecto castellano. Deber ser fuerte, pero no sé si tengo la necesidad de escuchar a los pajaritos hablando en mi idioma.
"Yo entiendo lo de Mateos; yo fui público suyo en aquellos shows grosos. Se pueden hacer varias lecturas". ¿Vamos con lo del vaso medio lleno o medio vacío? "Exacto. Si una banda se vuelve a juntar es porque alguna vez sucedió algo y quiere ver si vuelve a suceder. En mi caso, los quiero a todos y sé que si se juntan es porque les gusta tocar. Es cierto que suena a recurso, pero es gente que le dio tanto a la música que, a mi parecer, no tendrían nada que demostrar".
¿Y cuánto tiempo pasó del lanzamiento de "Contra reloj"?
Nosotros sacamos ese disco en el ‘86. Empezamos a grabarlo en marzo, abril, y salió en julio, agosto.
¿No da celebrar los 24 años y pico del disco que los hizo famosos?
Já, no creo. Hace poco vi a Paul McCartney en Phoenix y lo que más me llamó la atención fue su tremenda exaltación de los temas Beatle. Cuando hizo Blackbird, con los mismos intrumentos con los que lo había grabado, nos transportó a un lugar que jamás hubiéramos soñado. Con esto quiero decir que no hay por qué renegar del pasado.
Y aho...
Oí: de pronto una cámara lo muestra a Paul y él se ríe, ríe como un pibe. De todo el recital, me quedo con ese instante. Era como ver al beatle de los ‘60.
Y ahora ustedes se juntan para una gira nacional…
No nos juntamos. Nunca nos separamos. Nos tomamos un descanso entre el ‘89 y el ‘92, paramos unos años y eso fue realmente terapéutico, pero nunca nos separamos. Sí cambiamos músicos y ahora estamos tocando con Jota Morelli en batería (que reemplazó al histórico Daniel Pícolo).
¿Pero no les convendría aprovechar cierta confusión y vender un "Vuelven los Enanitos Verdes blá blá"?
No me parece correcto. El año pasado tocamos en Córdoba. ¿De dónde volvemos? ¡¡De Córdoba!! -se ríe Marciano, y si Marciano fuera un bombón te lo comerías de un bocado-. No, compañero, no tenemos necesidad de mentir: ya estoy más allá de eso. No quiero el éxito a cualquier costo. Es más, en lo que a mí respecta, somos súper exitosos, y en Buenos Aires ya somos una especie de grupo de culto.
Stop. Dos años atrás hablamos con Marciano que, no sé si saben, vive en el desierto de Sonora, ahí nomás de donde empezó la mítica reeducación de Carlitos Castaneda. Y esa vez, Marciano, dijiste algo así como que Mendoza le había quedado lejos al rock nacional y que con Buenos Aires siempre se habían sentido un poco empequeñecidos.
Marciano, mendocino y risueño ilustre: "Buenos Aires es como una mujer frígida. Igual, estoy mucho más a gusto en Buenos Aires. Aunque voy de paso, no me puedo olvidar de que viví en la Capital 17 años. Y cuando la recorro sólo tengo flashes deliciosos".
La gente ha visto marcianos y hay quien ha visto un perro marciano y hasta un tractor marciano. Y entre los que se preguntan por la vida extratererreste y los que quieren saber si los enanitos verdes, en minúscula, existen (el grupo y el cuento de la musa inspiradora), se nos viene encima una inquietud sobre ufología y alrededores:
¿Fabio Zerpa será fan de los Enanitos Verdes?
No sé, pero con los extraterrestres tengo cierto swing. Y te voy a decir algo que te va a sorprender: una vez estábamos haciendo una entrevista en Guadalajara, en un edificio con una ventana grande. ¡¿Qué es eso?! El cielo limpio y de golpe vemos una pelota plateada. La pelota girando en el cielo...
Fabio Zerpa también debe haber confundido ovnis con boeings 747...
No. Nosotros estábamos en un edificio y veíamos todo muy claro: la pelota estaba como a 15 cuadras y no queríamos cerrar los ojos para no perdernos nada, hasta que la pelota desapareció. Al otro día, estando en el aeropuerto, se lo dijimos al de la Torre de Control, y no desmintió nada. Igual, creo que con los extraterrestes tengo cierto swing. Cuando me compré un departamento en Buenos Aires, en Palermo, abrí la ventana y vi pasar algo a una velocidad increíble.
Vos que sabés, ¿en el 2025 quedará vida inteligente en la tierra?
Pienso en la frase de Einstein: no sé con qué armas se va a pelear en la siguiente Guerra mundial, pero seguro que en la otra se va a pelear con palos y piedras. Se están haciendo mil cagadas en el planeta. Ojalá reaccionemos. Los medios deberían servir para generar esa clase de conciencia.
Enanitos: más verdes que nunca.
¡Estoy ecológico! Yo vengo cada tanto y me llama la atención la cantidad de gente que fuma en la calle. Es raro, no se ve en otros lados. Pienso que no estamos comiendo bien y creo que es posible mejorar nuestras rutinas alimentarias. Yo lo hago, descubrí que la verdurita tienen sentido. Estoy cumpliendo 50 años y me siento mejor que a los 20, al menos me dan ganas de hacer cosas que no hacía 30 años atrás.
Vivís en el desierto de Sonora (su mujer es mexicana) y debés estar rodeado de chamanes. Contanos tus experiencias con el peyote.
Me gustaría experimentar, aunque el tiempo que tengo en Hermosillo, mi pueblo, es tiempo de descanso y no de experimentación. Tengo muchos amigos que probaron. Uno me dijo que se había acercado a un árbol y que empezó a escuchar a los pajaritos, y que los pajaritos hablaban en perfecto castellano. Deber ser fuerte, pero no sé si tengo la necesidad de escuchar a los pajaritos hablando en mi idioma.
Por Hernán Firpo
Fuente: Clarin.Com/Foto: Archivo.
No comments:
Post a Comment