La actriz argentina María Onetto presentó en el Festival de La Habana “Rompecabezas”, una película de Natalia Smirnoff en la que interpreta a una mujer que encuentra en el armado de rompecabezas una vía de escape a su vida gris y rutinaria, y que se convirtió en firme candidata al premio a la mejor opera prima del certamen.
La película, que compite en la sección Operas Primas al igual que “El pasante”, de Clara Picasso, y “Sin retorno”, de Miguel Cohan, narra la historia de una ama de casa sumisa y reprimida que decide abrirse a la vida y aventurarse a nuevas experiencias a partir de que descubre su pasión y un talento muy especial para armar puzzles en muy poco tiempo.
”Fue muy conmovedor ver el interés que puso el público cubano en los detalles, la forma en la que vivieron la película y las cosas que decían durante la proyección. Me puso muy bien tanta calidez humana”, afirmó la actriz, recordada además por sus papeles en “La mujer sin cabeza”, de Lucrecia Martel, y “Nunca estuviste tan adorable”, de Mausi Martínez.
En una entrevista con Télam, Onetto adelantó que interpretará a Arcadina -“una actriz con muchas ínfulas y una relación conflictiva con su hijo”- en “La gaviota”, la versión de la célebre obra del ruso Anton Chejov que dirigirá Daniel Veronese y que se pondrá en escena a partir de julio próximo en el Teatro General San Martín de la ciudad de Buenos Aires.
Si bien actualmente no posee ningún proyecto cinematográfico por delante, la actriz tendrá mucha actividad teatral durante el año próximo, ya que a partir del 20 de enero se repondrá en el espacio La Plaza la obra “El Dios salvaje”, dirigida por Javier Daulte en base al libro de Jazmina Reza, y a partir de abril saldrá de gira por el interior del país, Chile y Uruguay.
”Mi personaje es Verónica y la obra trata sobre dos matrimonios que se juntan porque sus hijos se pelearon y uno de ellos terminó con los dientes rotos. Es una obra que reflexiona sobre la violencia, una `tragedia divertida`, donde ellos van a demostrar que pueden ser mucho más violentos que sus niños”, explicó.
En relación a sus papeles en las películas de Smirnoff, Martel y Martínez, Onetto afirmó que “fueron desafíos muy diferentes, incluso desde el trabajo físico que tuve que hacer para cada una de ellas. Haber sido dirigida por mujeres le da una particularidad a mi situación, una comprensión más singular, ya que se trata de la mirada de una mujer observando y conduciendo a otra”, añadió.
La actriz se considera “muy vinculada con la dirección, en el sentido de que intento dar soluciones a los problemas que pueda plantear una escena. Por eso siempre trato de poner la menor cantidad de reparos y ser alguien dócil en el mejor sentido posible, para ayudar a llevar adelante la película de una manera más efectiva”.
”Sé perfectamente que es una epopeya la situación enorme de dirigir una película, entiendo las presiones que se viven y también entiendo cómo los directores defienden el camino que eligen para hacer la película de la manera que quieren”, agregó Onetto, quien señaló que “trabajar con Lucrecia Martel fue como jugar en Primera A”.
”El cine es siempre un desafío muy exigente, porque tengo que dominar una serie de ideas en relación a cómo encarar un personaje”.
”La mujer sin cabeza` fue el mayor desafío de mi carrera, porque tuve que entrenarme físicamente, aprender a manejar, hacerme cambios en el pelo y poder convertirme en una mujer que sufre una gran turbulencia interior”, recordó.
La actriz dijo que “en `Rompecabezas` el desafío fue interpretar a un personaje que está en todas las escenas de la película. A eso se sumaba el hecho de que el público se tenía que interesar en mí, para lo cual tenía que evitar ser monótona expresivamente y debía tener variantes, además de lo difícil que fue mantener el mismo ánimo en escenas filmadas en distintos órdenes cronológicos”.
”Por suerte -agregó- Smirnoff fue asistente de dirección y directora de casting antes de dirigir `Rompecabezas`, y esa particularidad la hace alguien con una mirada muy lúcida y aguda sobre la actuación. Es una directora que mantiene un vínculo muy estrecho con los actores y nos dio un gran permiso y confianza para improvisar”.
Onetto, quien también trabajó en televisión en series muy populares como “Montecristo”, “Tratame bien” y “Mujeres asesinas”, afirmó que se interesa por un proyecto cuando cree que “un director puede sacar lo mejor de mí como actriz. Me gusta mucho hacer personajes muy distintos y lejanos a mi forma de ser, porque eso me permite descubrir e involucrarme con otros mundos desconocidos”.
“La clave -según cree- está en el guión, en el encuentro con el director y en lo que piensa sobre el personaje. Al tener la posibilidad de leer guiones tan buenos y entrañables, al personaje siempre lo entiendo frente a la posibilidad que tiene de transformación durante la película y también frente a lo que yo puedo aportarle”.
”Fue muy conmovedor ver el interés que puso el público cubano en los detalles, la forma en la que vivieron la película y las cosas que decían durante la proyección. Me puso muy bien tanta calidez humana”, afirmó la actriz, recordada además por sus papeles en “La mujer sin cabeza”, de Lucrecia Martel, y “Nunca estuviste tan adorable”, de Mausi Martínez.
En una entrevista con Télam, Onetto adelantó que interpretará a Arcadina -“una actriz con muchas ínfulas y una relación conflictiva con su hijo”- en “La gaviota”, la versión de la célebre obra del ruso Anton Chejov que dirigirá Daniel Veronese y que se pondrá en escena a partir de julio próximo en el Teatro General San Martín de la ciudad de Buenos Aires.
Si bien actualmente no posee ningún proyecto cinematográfico por delante, la actriz tendrá mucha actividad teatral durante el año próximo, ya que a partir del 20 de enero se repondrá en el espacio La Plaza la obra “El Dios salvaje”, dirigida por Javier Daulte en base al libro de Jazmina Reza, y a partir de abril saldrá de gira por el interior del país, Chile y Uruguay.
”Mi personaje es Verónica y la obra trata sobre dos matrimonios que se juntan porque sus hijos se pelearon y uno de ellos terminó con los dientes rotos. Es una obra que reflexiona sobre la violencia, una `tragedia divertida`, donde ellos van a demostrar que pueden ser mucho más violentos que sus niños”, explicó.
En relación a sus papeles en las películas de Smirnoff, Martel y Martínez, Onetto afirmó que “fueron desafíos muy diferentes, incluso desde el trabajo físico que tuve que hacer para cada una de ellas. Haber sido dirigida por mujeres le da una particularidad a mi situación, una comprensión más singular, ya que se trata de la mirada de una mujer observando y conduciendo a otra”, añadió.
La actriz se considera “muy vinculada con la dirección, en el sentido de que intento dar soluciones a los problemas que pueda plantear una escena. Por eso siempre trato de poner la menor cantidad de reparos y ser alguien dócil en el mejor sentido posible, para ayudar a llevar adelante la película de una manera más efectiva”.
”Sé perfectamente que es una epopeya la situación enorme de dirigir una película, entiendo las presiones que se viven y también entiendo cómo los directores defienden el camino que eligen para hacer la película de la manera que quieren”, agregó Onetto, quien señaló que “trabajar con Lucrecia Martel fue como jugar en Primera A”.
”El cine es siempre un desafío muy exigente, porque tengo que dominar una serie de ideas en relación a cómo encarar un personaje”.
”La mujer sin cabeza` fue el mayor desafío de mi carrera, porque tuve que entrenarme físicamente, aprender a manejar, hacerme cambios en el pelo y poder convertirme en una mujer que sufre una gran turbulencia interior”, recordó.
La actriz dijo que “en `Rompecabezas` el desafío fue interpretar a un personaje que está en todas las escenas de la película. A eso se sumaba el hecho de que el público se tenía que interesar en mí, para lo cual tenía que evitar ser monótona expresivamente y debía tener variantes, además de lo difícil que fue mantener el mismo ánimo en escenas filmadas en distintos órdenes cronológicos”.
”Por suerte -agregó- Smirnoff fue asistente de dirección y directora de casting antes de dirigir `Rompecabezas`, y esa particularidad la hace alguien con una mirada muy lúcida y aguda sobre la actuación. Es una directora que mantiene un vínculo muy estrecho con los actores y nos dio un gran permiso y confianza para improvisar”.
Onetto, quien también trabajó en televisión en series muy populares como “Montecristo”, “Tratame bien” y “Mujeres asesinas”, afirmó que se interesa por un proyecto cuando cree que “un director puede sacar lo mejor de mí como actriz. Me gusta mucho hacer personajes muy distintos y lejanos a mi forma de ser, porque eso me permite descubrir e involucrarme con otros mundos desconocidos”.
“La clave -según cree- está en el guión, en el encuentro con el director y en lo que piensa sobre el personaje. Al tener la posibilidad de leer guiones tan buenos y entrañables, al personaje siempre lo entiendo frente a la posibilidad que tiene de transformación durante la película y también frente a lo que yo puedo aportarle”.
Por Paulo Pécora, enviado especial.
Mirá el trailer de "Rompecabezas" de Natalia Smirnoff.
Fuente: Agencia de Noticias Télam.
Foto: Archivo.
Video: YouTube/Canal de natsmirnoff.
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