Un lugar en el mundo.
"Kibbutz; colonia, settlement, asentamiento, rincón elegido donde alzar la tienda final, donde salir al aire de la noche con la cara lavada por el tiempo, y unirse al mundo, a la Gran Locura, a la Inmensa Burrada, abrirse a la cristalización del deseo, al encuentro" - Julio Cortázar.
Existe un lugar ideal; un lugar geográfico, real, pero en el que nunca estuvimos y así y todo, a pesar de ser desconocido, nos obsesiona inexplicablemente, lo idealizamos sin entender bien por qué. Puede ser intercambiable (en mi caso: Islandia rota junto a Irlanda y Suecia y oh, por dió, qué nauseabundamente eurocentrista), de acuerdo al humor, a la etapa de tu vida, dependiendo de quién sea el objeto -el sujeto- de tu odio, de tu adoración, de tu indiferencia. Porque, claro, un puente no se sostiene de un solo lado.
Hoy Islandia, tiñéndolo todo con ese dejo inevitable de tristeza y de blanca misantropía, me pone loca. Y no es tan random: escuchamos cómo el volcán de Eyjafjallajökull (acá un "paso a paso: cómo aprender a pronunciarlo al ritmo del ukelele") le está cagando la vida a mucha gente durante estos días; ayer, también, escuché cómo Jonathan Richman (que toca mañana y pasado en el Salón Real) anunciaba cuál era la música "actual" que estaba escuchando: Ólöf Arnalds (no Olafur Arnalds), fue su primera opción (después diría TV on the Radio), una cantautora folky e islandesa que yo no conocía pero que luego me enteré que formó parte de Múm.
¿Qué sabemos de Islandia, además de que es ese sitio hermoso, remoto y helado en el que la suma azarosa de muchas consonantes en algo así como "jrsnfgtwl" tranquilamente podría significar "vaso" o "mamá"? Bueno, conocemos (o no) a Sigur Rós, a su cantante Jónsi, a Múm, a Amiina y, claro, a Sugarcubes y Björk; y, aunque pasan cosas como esta y esta, Islandia es musicalmente melancólica; no puede evitar transmitir la profundidad reflexiva de sus paisajes en cada acorde. Por eso, el primer Random de la semana (prometí que serían dos, cumpliré), incluye cuatro bandas islandesas más o menos nuevas -que cantan en inglés- y el bonus de Gling Gló (1990), el increíble álbum de Björk Guðmundsdóttir & Tríó Guðmundar Ingólfssonar (o sea, Björk con un trío de jazz). Escuchen, miren y, por favor, si conocen más cosas, compartan.
Existe un lugar ideal; un lugar geográfico, real, pero en el que nunca estuvimos y así y todo, a pesar de ser desconocido, nos obsesiona inexplicablemente, lo idealizamos sin entender bien por qué. Puede ser intercambiable (en mi caso: Islandia rota junto a Irlanda y Suecia y oh, por dió, qué nauseabundamente eurocentrista), de acuerdo al humor, a la etapa de tu vida, dependiendo de quién sea el objeto -el sujeto- de tu odio, de tu adoración, de tu indiferencia. Porque, claro, un puente no se sostiene de un solo lado.
Hoy Islandia, tiñéndolo todo con ese dejo inevitable de tristeza y de blanca misantropía, me pone loca. Y no es tan random: escuchamos cómo el volcán de Eyjafjallajökull (acá un "paso a paso: cómo aprender a pronunciarlo al ritmo del ukelele") le está cagando la vida a mucha gente durante estos días; ayer, también, escuché cómo Jonathan Richman (que toca mañana y pasado en el Salón Real) anunciaba cuál era la música "actual" que estaba escuchando: Ólöf Arnalds (no Olafur Arnalds), fue su primera opción (después diría TV on the Radio), una cantautora folky e islandesa que yo no conocía pero que luego me enteré que formó parte de Múm.
¿Qué sabemos de Islandia, además de que es ese sitio hermoso, remoto y helado en el que la suma azarosa de muchas consonantes en algo así como "jrsnfgtwl" tranquilamente podría significar "vaso" o "mamá"? Bueno, conocemos (o no) a Sigur Rós, a su cantante Jónsi, a Múm, a Amiina y, claro, a Sugarcubes y Björk; y, aunque pasan cosas como esta y esta, Islandia es musicalmente melancólica; no puede evitar transmitir la profundidad reflexiva de sus paisajes en cada acorde. Por eso, el primer Random de la semana (prometí que serían dos, cumpliré), incluye cuatro bandas islandesas más o menos nuevas -que cantan en inglés- y el bonus de Gling Gló (1990), el increíble álbum de Björk Guðmundsdóttir & Tríó Guðmundar Ingólfssonar (o sea, Björk con un trío de jazz). Escuchen, miren y, por favor, si conocen más cosas, compartan.
Seabear: "Arms" (también el cantante, Sin Fang Bous, tiene un lindo disco solista)
Ampop: "My Delusions"
Lay Low: "Please Don´t Hate Me"
Mugison: "Jesus is a Good Name to Moan"
Autor: Yamila Trautman.Publicado en el Blog HOT TRACKS: El Tema Nuestro De Cada Día.
Fuente: Revista Rolling Stone de Argentina.
Fotos: Archivo CGCRecodingSA®
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