Andrés Calamaro despide el año en el mítico Luna Park
El 2009 fue un buen año para Andrés Calamaro. Fe de ello pueden dar la buena aceptación que tuvo su Obras Incompletas (una edición de 6 CDs, un DVD doble y un libro) y la extensa gira que lo llevó a recorrer buena parte del mundo y que culminará el próximo 13 de diciembre en el estadio Luna Park.
El Salmón se muda al Luna Park al no poder repetir el Ciudad
El 2009 fue un buen año para Andrés Calamaro. Fe de ello pueden dar la buena aceptación que tuvo su Obras Incompletas (una edición de 6 CDs, un DVD doble y un libro) y la extensa gira que lo llevó a recorrer buena parte del mundo y que culminará el próximo 13 de diciembre en el estadio Luna Park.
Originalmente la despedida del año de El Salmón se iba a producir un día antes en el Club Ciudad de Buenos Aires, pero los 30 mil tickets agotados llevaron a sumar una función en el mítico espacio de Bouchard 465.
Originalmente la despedida del año de El Salmón se iba a producir un día antes en el Club Ciudad de Buenos Aires, pero los 30 mil tickets agotados llevaron a sumar una función en el mítico espacio de Bouchard 465.
El cambio de escenario respondió a la imposibilidad de sumar otro Club Ciudad ante las quejas elevadas por los vecinos de ese predio a la Justicia y que durante el año hizo peligrar varios shows nacionales e internacionales.
El agregado de la nueva función se conoció en la tarde del último viernes y ayer en su sitio web, transformado en una suerte de bitácora de su última gira, Calamaro colgó un texto en agradecimiento a sus fans y buscando ahuyentar los malos espíritus. La fecha elegida para el show del Luna Park es el 13 (domingo), por eso Andrés se encomendó a la figura de San Pugliese, suerte de patrono de los músicos y rebautizó el día como 12 +1.
“(otra vez) Gracias (very much) por reventar las taquillas del City Club; esperamos entonces la bendición de Mauricio para que los decibelios estén a la altura de la generosidad, y la lealtad, de ustedes, oh respetable publico treinta mil veces presente.
Con una par de eggs vamos a sumar a la fiesta un Luna Park y, con la asistencia de San Oswaldo Pugliese, vamos a cantar el Doce más uno, con el izquierdo en la mano & dejando la piel (en este caso la garganta) en el tradicional escenario que supo ser testigo de las victorias (y las trompadas) de Carlos Monzón y Nicolino Locche. Ya es oficial que agotaron las, de por si, enormes instalaciones del Ciudad (que se despide del rock después de una inclemente batalla por el volumen adecuado) & que, desafiando la súper-tradición vamos a celebrar nuestro tercer/a luna porteña, esta vez (suporongo yo) que sin las saladas plateas de mayo; de parte de mi guardia pretoriana, mis primeras espadas y yo, va nuestra gratitud por acompañarnos de (con) semejante (y exagerada) forma; nosotros nos merecemos aquello que hacemos, nos vemos entonces bajo el cielo de diciembre y/o en el histórico LP”.
Y como para dejar en claro cuanto pesan estas creencias en el ambiente de la música, a ese texto le sumó la oración que cientos de músicos pronuncian antes de salir a escena. “Protégenos de todo aquel que no escucha./ Ampáranos de la mufa de los que insisten con la patita de pollo nacional./ Ayúdanos a entrar en armonía e ilumínanos para que no sea la desgracia la unica accion cooperativa./ Llévanos con tu misterio hacia una pasion que nos parta los huesos y no nos deje en silencio mirando un bandoneon sobre una silla”.
Quizás el 2010 encuentre a Calamaro editando un nuevo disco de estudio tras el ya lejano La lengua popular (2007).
El agregado de la nueva función se conoció en la tarde del último viernes y ayer en su sitio web, transformado en una suerte de bitácora de su última gira, Calamaro colgó un texto en agradecimiento a sus fans y buscando ahuyentar los malos espíritus. La fecha elegida para el show del Luna Park es el 13 (domingo), por eso Andrés se encomendó a la figura de San Pugliese, suerte de patrono de los músicos y rebautizó el día como 12 +1.
“(otra vez) Gracias (very much) por reventar las taquillas del City Club; esperamos entonces la bendición de Mauricio para que los decibelios estén a la altura de la generosidad, y la lealtad, de ustedes, oh respetable publico treinta mil veces presente.
Con una par de eggs vamos a sumar a la fiesta un Luna Park y, con la asistencia de San Oswaldo Pugliese, vamos a cantar el Doce más uno, con el izquierdo en la mano & dejando la piel (en este caso la garganta) en el tradicional escenario que supo ser testigo de las victorias (y las trompadas) de Carlos Monzón y Nicolino Locche. Ya es oficial que agotaron las, de por si, enormes instalaciones del Ciudad (que se despide del rock después de una inclemente batalla por el volumen adecuado) & que, desafiando la súper-tradición vamos a celebrar nuestro tercer/a luna porteña, esta vez (suporongo yo) que sin las saladas plateas de mayo; de parte de mi guardia pretoriana, mis primeras espadas y yo, va nuestra gratitud por acompañarnos de (con) semejante (y exagerada) forma; nosotros nos merecemos aquello que hacemos, nos vemos entonces bajo el cielo de diciembre y/o en el histórico LP”.
Y como para dejar en claro cuanto pesan estas creencias en el ambiente de la música, a ese texto le sumó la oración que cientos de músicos pronuncian antes de salir a escena. “Protégenos de todo aquel que no escucha./ Ampáranos de la mufa de los que insisten con la patita de pollo nacional./ Ayúdanos a entrar en armonía e ilumínanos para que no sea la desgracia la unica accion cooperativa./ Llévanos con tu misterio hacia una pasion que nos parta los huesos y no nos deje en silencio mirando un bandoneon sobre una silla”.
Quizás el 2010 encuentre a Calamaro editando un nuevo disco de estudio tras el ya lejano La lengua popular (2007).
Fuente: ElArgentino.Com... Gracias Totales a ellos por el aporte. CGCRecordingSA®
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