La actriz de El Elegido habló sobre el trágico final que tuvo su personaje a manos de Verónica San Martín (Leticia Brédice). Destacó su primera experiencia en televisión y adelantó cuáles son los próximos pasos que dará en su carrera artística.
La historia de El Elegido se torna más oscura capítulo a capítulo. Como parte de una escalada de violencia que comenzó con el asesinato de María (Leonor Manso) y Alfredo (Patricio Contreras), ahora le llegó el turno a Gigi (Paula Kohan), la novia de Greta (Mónica Antonópulos).
Luego del trágico desenlace de su personaje, Paula Kohan conversó con ElArgentino.com sobre sobre su actuación en la tira de Telefé y adelantó los próximos pasos que dará en su carrera.
Gigi había quedado embarazada de David Nevares Sosa (Luciano Cáceres), en su afán por alcanzar la maternidad y construir una familia junto a su novia. Ilusionada con su futuro, estaba completamente abocada a su rol de futura madre cuando un desconocido la interceptó en su casa y la secuestró. En una habitación cerrada, la hicieron parir y le entregaron el bebé a la villana de la trama: Verónica San Martín (Leticia Brédice).
Después de escaparse del lugar en el que estaba confinada y arreglar un encuentro con Mariana (Paola Krum), Gigi se cruzó con Verónica, quien la invitó a tomar un té. Envalentonada, se levantó para asesinarla. Pero ya era tarde. Se desvaneció por el poder del veneno que acababa de beber, víctima de su ingenuidad. Inmediatamente después, su cuerpo fue cubierto por una alfombra.
ElArgentino.com: ¿Cómo ves el final de Gigi en El Elegido?
Paula Kohan: Me pareció un final heroico. De alguna manera, ella estaba marcada por su destino; tuvo una infancia no muy feliz y así fue como pensamos el personaje junto a la autora, Adriana Lorenzón. Gigi intentó modificar su historia y su deseo fue el de formar la familia que nunca tuvo. Y la formó dentro de muchos errores que cometió, pero la formó.
EA: ¿Cuáles fueron los lineamientos que te dio la autora para la construcción del personaje?
PK: Adriana es una gran autora, que te da muchas herramientas para construir tu personaje. Desde ese punto, Gigi pasó por dos momentos. En una primera etapa, se la podía ver como una chica inmadura que se dejaba llevar por sus impulsos y era medio pendeja. Amaba perdidamente a Greta y las cosas que hacía no siempre eran de la mejor manera.
Después, se empezó a ver a una mujer que quería ser madre, que quería empezar a hacer las cosas bien, una luchadora.
Para interpretarla, la justificaba. Nunca me pasó algo así, pero pienso que si a uno le roban un hijo haría las cosas más impensadas. Por eso, Gigi se subió a ese taxi con Verónica, fue a donde estaba el bebé y cuando le da de mamar y llora, lo deja en el lugar que está y va a buscar una mamadera. Cuando estás en una situación así, todo es posible.
EA: ¿Cómo encaraste el tratamiento de la relación de pareja entre tu personaje y el de Mónica Antonópulos?
PK: Fue muy respetado, se hizo desde un lugar alejado de lo morboso. Mucha gente se sintió identificada con la relación y fue todo muy cuidado, desde la parte autoral, la producción y nosotras como actrices. Las escenas se veían muy naturales.
Pude mostrar muchos colores como actriz y estoy muy contenta, ya que es mi primera experiencia en televisión. Yo vengo del teatro y haber estado en El Elegido me dejó muy feliz. La gente que me escribe vía Facebook, vía Twitter, me muestra que se encariñó con el personaje.
EA: ¿Qué te espera en el futuro profesional? ¿Vas a hacer teatro, televisión?
PK: En principio, lo que te puedo contar es que me llamaron de la productora de (Enrique) Estevanez para hacer un unitario que se produce con el INCAA. Se llama “Adictos” y voy a protagonizar un capítulo sobre una adicta al alcohol y las drogas. Se va a emitir por Telefe o Canal 7 y es un protagónico.
EA: Un personaje jugado.
PK: ¡Sí! De hecho, ahora estoy yendo al (Hospital) Borda a observar a las personas que están internadas. Mi hermano trabaja ahí, es psiquiatra, y visitar el lugar me va a ayudar a componer un papel tan difícil.
Luego del trágico desenlace de su personaje, Paula Kohan conversó con ElArgentino.com sobre sobre su actuación en la tira de Telefé y adelantó los próximos pasos que dará en su carrera.
Gigi había quedado embarazada de David Nevares Sosa (Luciano Cáceres), en su afán por alcanzar la maternidad y construir una familia junto a su novia. Ilusionada con su futuro, estaba completamente abocada a su rol de futura madre cuando un desconocido la interceptó en su casa y la secuestró. En una habitación cerrada, la hicieron parir y le entregaron el bebé a la villana de la trama: Verónica San Martín (Leticia Brédice).
Después de escaparse del lugar en el que estaba confinada y arreglar un encuentro con Mariana (Paola Krum), Gigi se cruzó con Verónica, quien la invitó a tomar un té. Envalentonada, se levantó para asesinarla. Pero ya era tarde. Se desvaneció por el poder del veneno que acababa de beber, víctima de su ingenuidad. Inmediatamente después, su cuerpo fue cubierto por una alfombra.
ElArgentino.com: ¿Cómo ves el final de Gigi en El Elegido?
Paula Kohan: Me pareció un final heroico. De alguna manera, ella estaba marcada por su destino; tuvo una infancia no muy feliz y así fue como pensamos el personaje junto a la autora, Adriana Lorenzón. Gigi intentó modificar su historia y su deseo fue el de formar la familia que nunca tuvo. Y la formó dentro de muchos errores que cometió, pero la formó.
EA: ¿Cuáles fueron los lineamientos que te dio la autora para la construcción del personaje?
PK: Adriana es una gran autora, que te da muchas herramientas para construir tu personaje. Desde ese punto, Gigi pasó por dos momentos. En una primera etapa, se la podía ver como una chica inmadura que se dejaba llevar por sus impulsos y era medio pendeja. Amaba perdidamente a Greta y las cosas que hacía no siempre eran de la mejor manera.
Después, se empezó a ver a una mujer que quería ser madre, que quería empezar a hacer las cosas bien, una luchadora.
Para interpretarla, la justificaba. Nunca me pasó algo así, pero pienso que si a uno le roban un hijo haría las cosas más impensadas. Por eso, Gigi se subió a ese taxi con Verónica, fue a donde estaba el bebé y cuando le da de mamar y llora, lo deja en el lugar que está y va a buscar una mamadera. Cuando estás en una situación así, todo es posible.
EA: ¿Cómo encaraste el tratamiento de la relación de pareja entre tu personaje y el de Mónica Antonópulos?
PK: Fue muy respetado, se hizo desde un lugar alejado de lo morboso. Mucha gente se sintió identificada con la relación y fue todo muy cuidado, desde la parte autoral, la producción y nosotras como actrices. Las escenas se veían muy naturales.
Pude mostrar muchos colores como actriz y estoy muy contenta, ya que es mi primera experiencia en televisión. Yo vengo del teatro y haber estado en El Elegido me dejó muy feliz. La gente que me escribe vía Facebook, vía Twitter, me muestra que se encariñó con el personaje.
EA: ¿Qué te espera en el futuro profesional? ¿Vas a hacer teatro, televisión?
PK: En principio, lo que te puedo contar es que me llamaron de la productora de (Enrique) Estevanez para hacer un unitario que se produce con el INCAA. Se llama “Adictos” y voy a protagonizar un capítulo sobre una adicta al alcohol y las drogas. Se va a emitir por Telefe o Canal 7 y es un protagónico.
EA: Un personaje jugado.
PK: ¡Sí! De hecho, ahora estoy yendo al (Hospital) Borda a observar a las personas que están internadas. Mi hermano trabaja ahí, es psiquiatra, y visitar el lugar me va a ayudar a componer un papel tan difícil.
Por Pablo Méndez Shiff @pableshiff (ElArgentino.Com)
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